Nos ponemos al volante de dos de los Q más importantes para Audi: el Q2 y el Q5. El primero porque se encarga de dar acceso a dicha familia y el segundo porque es la variante más equilibrada de todas.
Desde la llegada del primer Q7 allá por el año 2005, la familia Q de Audi no ha hecho sino crecer. Muchas son las opciones propuestas, desde un concepto más urbano como es el del Q2 hasta uno de corte coupé como el Q8. Gama que durante el 2021 recibirá además la llegada del primer integrante 100% eléctrico, el Q4 e-tron con su declinación deportiva Q4 e-tron Sportback. Pues bien, justo antes de despedir este año tan aciago, hemos tenido la oportunidad de conducir las actualizaciones de dos de los Q más importantes para Audi: Q5 y Q2. Ambos se han renovado en profundidad con el objetivo de seguir aumentando su cartera de clientes, retocando puntos tan importantes como el diseño, la seguridad, la conectividad y la eficiencia.
Audi Q5 2021
Comenzando por el hermano mayor, hay que decir que los diseñadores de Audi han sabido aumentar el atractivo de un modelo que, sin que suene a mucha crítica, era bastante soso. Han bastado dos pinceladas como son la implantación de la parrilla singleframe del Q8 y las hendiduras en la parte inicial del capó, para que la mirada de este Q5 2021 cambie por completo. También se han modificado los paragolpes delantero y trasero (causantes de que la longitud total se incremente hasta los 4,68 m) y las firmas lumínicas.
Hablando de luces, como sabrás Audi es uno de los fabricantes que más recursos y presupuesto destina siempre este apartado y si en el e-tron Sportback introdujo los nuevos faros digitales delanteros, en el Q5 se centra en la tecnología OLED para los traseros. Compuesto por tres segmentos de luces, cada una con seis luces OLED esta tecnología ha sido tomada prestada directamente del A8. Entre sus peculiaridades están tanto la personalización, pues el usuario puede elegir una de las tres animaciones propuestas a la hora de comprarlo a la que se suma una cuarta adherida al programa dynamic del Audi drive select, como la seguridad pues estas luces OLED tienen una función de aviso que alerta al conductor que nos sigue si este se acerca a menos de dos metros de nuestra zaga. Alerta que se visualiza con el encendido del segmento superior.
Si pasamos al interior, lo primero que uno percibe es que la calidad general se mantiene intacta. Pese a no ser el Q más lujoso de todos, entrar en su habitáculo siempre es un gusto por lo bien cuidado que está. Característica a la que ahora se suma una conectividad mucho mayor gracias al nuevo monitor de 10,1 pulgadas que preside el puesto de conducción y que ya montan tanto el A4 como el A5 Coupé.
Una solución que suprime el característico MMI Touch pues la función táctil capacitiva de la pantalla es muy intuitiva, aumentando considerablemente el espacio reinante en la consola central. Hablando de espacio, este no se ve alterado en el resto del vehículo y además de poder contar con una banqueta trasera deslizable longitudinalmente, el maletero mantiene intactos los 550 litros iniciales. En lo que a conectividad se refiere, está completamente asegurada al poder incluir navegación conectada con imágenes por satélite mediante Google Earth, servicios car-to-x, comunicación con los semáforos, sincronización móvil mediante Apple CarPlay inalámbrico o Android Auto.
En lo que a equipamiento se refiere, desde el básico el Q5 incorpora faros LED, climatizador automático, llantas de aleación de 18 pulgadas, Audi drive select, portón del maletero eléctrico, Audi parking sistema plus, retrovisores calefactables, volante multifunción plus, control de crucero, cuadro de instrumentos digital y Audi Connect & Service…. Para optar por los comentados faros OLED hay que montar obligatoriamente los Matrix LED y desembolsar un total de 2.910 euros (si solo queremos los Matrix LEX cuestan 1.630 €).
El Q5 se electrifica
Bajo el capó, la gama mecánica del nuevo Q5 sigue un mismo patrón. El de la electrificación. Si bien la punta de lanza será la doble variante híbrida, Q5 TFSIe que llegará en unos meses con más de 50 km de recorrido eléctrico y la etiqueta CERO, el resto suma un interesante sistema de microhibridación mediante batería de 12 o de 48 voltios. De inicio tanto el gasolina 45 TFSI de 265 CV como el 35 TDI de 163 CV y el 40 TDI de 204 CV lo harán con la batería de 12 V, mientras que el SQ5 TDI de341 CV que llegará en primavera lo hará con un sistema de hibridación ligera de 48 voltios. Sea como fuere todos lucirán la etiqueta ECO de la DGT. Además, todos se combinan de serie con la caja de cambios automática S tronic mientras que la tracción total inteligente quattro-Ultra será un estándar en todos menos en el 35 TDI, al que llegará más adelante
En el apartado dinámico, apenas hay cambios reseñables y el Q5 sigue comportándose como un de los todocaminos medios más equilibrados de su categoría. Es tan bueno para rodar tranquilamente por autopista, devorando kilómetros sin que lo noten sus ocupantes, como para entrar en una carretera revirada e, incluso, salir a zonas no asfaltadas sin sufrir. Parte de culpa la tiene, entre otros la posibilidad de equipar la suspensión neumática con la que variar la altura libre al suelo en función del programa seleccionado en el Audi drive select. Durante la toma de contacto condujimos el que entendemos es el motor más equilibrado de todos, el 40 TDI S tronic quattro-Ultra que genera 204 CV y 400 Nm de par. Un bloque enérgico con una respuesta muy progresiva en todo el rango de revoluciones que le permite cifrar un 0 a 100 km/h de 7,6 segundos y alcanzar una punta de 222 km/h.
La gama comercial del Q5 está compuesta por tres niveles de acabados, básico, Advance y S line a los que se suma el paquete Black line que tinta en negro muchas de las partes externas del coche (parrilla, marcos de las ventanillsa, línea trasera, carcasas de los retrovisores…). En cuanto a los precios, la gama actual arranca en los 59.130 € y llega hasta los 61.130 €.
Audi Q2 2021
Tras el mayor, tocó el turno del pequeño: el Q2. Un modelo que surgió hace cuatro años revolucionando el concepto que teníamos de los Q de Audi. Con un diseño juvenil e indefinible en poco tiempo ha sabido ganarse el favor del público. Ahora, gracias a los cambios estéticos introducidos, el Q2 2021 se rejuvenece aún más si cabe. Modificaciones que afectan tanto al sistema de iluminación, con un una nueva firma LED diurna o estrenando la tecnología Matrix LED, una parrilla colocada en una posición más baja que enfatiza la anchura, paragolpes más prominentes (crece 1,7 cm a lo largo, hasta los 4,21 metros), un difusor más visible y un capó con las tomas de aire en su parte delantera.
En el interior hay quizá menos revolución aunque sí percibimos un puesto de conducción más digitalizado gracias a que todos los Q2 montan de serie un cuadro digital. Es de 10,25 pulgadas pudiendo aumentar hasta las 12,3” del Audi virtual cockpit cuando montamos el MMI Navegación plus. Aquí sí se mantiene el MMI Touch para manejar la pantalla central, cuyo tamaño alcanza las 8,3 pulgadas en este configuración (parte de las 7).
En lo que a conectividad y entretenimiento se refiere, el Q2 se completa con el Audi phone box, el equipo de audio Bang & Olufsen Premium Sound System, con 14 altavoces y una potencia de 705 vatios, el módulo LTE para la transmisión de datos a alta velocidad, un punto de acceso Wi-Fi, que los pasajeros pueden utilizar para conectar sus dispositivos móviles, la sincronización móvil mediante Apple CarPlay o los servicios de Audi connect. La personalización también ha mejorado con la introducción de nuevas molduras decorativas mientras que la habitabilidad se mantiene intacta.
Al igual que ocurre con el Q5, el Q2 no ofrece un cambio radical en lo que a comportamiento se refiere y mantiene su versatilidad de uso proporcionada por su compacto tamaño. Se desenvuelve con soltura tanto por ciudad como por autopista y por carretera secundaria. Que se pueda escoger con hasta tres tipos de suspensión, normal, deportiva y adaptativa, habla mucho de él. Además, en esta actualización se ha instalado una nueva cámara en el parabrisas, permitiéndole incorporar inéditos asistentes a la conducción que se reparten en tres paquetes de asistencia: Conducción, Aparcamiento y Seguridad.
Mecánicamente, la gama arranca con el gasolina 30 TFSI de tres cilindros y 110 CV acoplado a la caja manual de seis relacione, sigue con el 35 TFSI ya con el 1.5 Turbo de 150 CV pudiendo acoplarse también a la caja automática S tronic y finaliza con el 40 TFSI y el SQ2, ambos con el 2.0 turbo de cuatro cilindros, con caja automática y tracción total que entregan 190 y 300 CV, respectivamente. En el caso de este último, como ocurría hasta el momento, será el Q2 más rápido de todos al cifrar un 0 a 100 km/h de tan solo 4,9 segundos. En cuanto al diésel, habrá dos opciones, ambas a partir del 2.0 TDI de cuatro cilindros: el 30 TDI de 116 CV que llegará en enero y el 35 TDI de 150 CV, siendo exclusivamente de tracción delantera y pudiendo asociarse a ambas transmisiones.
Con todo, la gama actual del Q2 se estructura en cuatro acabados: básico, Advanced, S line y Black line con precios que parten de los 27.960 € para un Q2 30 TFSI básico que ya incluye faros LED delanteros, sensores de aparcamiento traseros, control de velocidad de crucero, doble tomas USB delanteras, cuadro de instrumentos digital de 10,25 pulgadas, asistente de arranque en pendientes y todos los servicios asociados a Audi connect emergency call & service y Audi connect remote & control.